Hoy es un día especial. Diferente. ¿Por qué? Porque vamos a salirnos un poco de la línea editorial que seguimos en nuestro blog. Éste no es un artículo en el que vamos a contar lo mucho que te podemos ayudar desde Gunka Studios, que también lo haremos. Tampoco vamos a hablar de las muchas posibilidades que ofrece el mundo de las aplicaciones móviles y del desarrollo web, que también lo mencionaremos. Hoy vamos a buscar un límite. Ese que nos hace preguntarnos a nosotros mismos lo siguiente: ¿qué tipos de aplicaciones no podemos desarrollar para móviles? ¿Hasta donde podemos llegar, de momento?
¿Qué tipos de aplicaciones móviles existen actualmente?
Pero antes de meternos en esa inquietante pregunta que nos hemos hecho, veamos cómo está el panorama actualmente. Si hablamos de aplicaciones móviles, lo hacemos sobre un amplísimo mundo que no para de crecer y que ofrece múltiples oportunidades de negocio. De hecho, en Gunka Studios somos conscientes y por eso ofrecemos un servicio de lo más técnico y especializado en ello.
Ahora bien, ¿qué tipos de app móviles hay ahora mismo? Podemos establecer que en la actualidad se desarrollan, principalmente 4 tipos de aplicaciones para móviles. Así que ir detallándolas:
Aplicaciones móviles nativas
Las aplicaciones nativas son aquellas que se desarrollan con el mismo lenguaje que el sistema operativo del dispositivo. Es decir, que son aplicaciones desarrolladas para Android o iOS. A la hora de implementarlas, son como un programa de ordenador que se instala en el smartphone, para el cual están hechas prácticamente a medida.
Lo positivo de ellas es que favorecen mucho las experiencias de usuario y la calidad suele ser alta. Además, a diferencia de las que veremos a continuación, las apps nativas acceden a todo lo que ofrecen los smartphones: GPS, cronometro, altavoces, cámara… Sin embargo, son un tipo de app que conlleva una mayor inversión de recursos en su desarrollo.
Las web app
Un segundo tipo de app móvil serían las conocidas como web apps. Sin embargo, como su propio nombre indica, son programas que están diseñados a nivel técnico para su desarrollo a nivel web, con la salvedad de que se adaptan a otros dispositivos, como puede ser un smartphone o una tableta. Las principales diferencias con las aplicaciones nativas es que:
- Necesitan de conexión a Internet, ya que se accede a ellas a través de un navegador.
- No están disponibles como apps de iOS o Android en las Play Store o Apple Store.
También cabe destacar en este punto que, aunque no estén diseñadas específicamente para móviles, las web app son versiones muy avanzadas para su ejecución en otros dispositivos diferentes al ordenador. Son más económicas y requieren menos inversión de tiempo en su desarrollo. Aun así, no ofrecen todas las potencialidades que sí ofrecen las apps nativas. Por lo tanto, la experiencia de usuario suele ser peor, con una velocidad en general inferior.
Aplicaciones móviles híbridas
En tercer lugar, encontramos las aplicaciones móviles híbridas. Son, como seguro que intuyes, una mezcla entre los dos modelos de app que ya hemos explicado. Las apps móviles híbridas pueden ofrecer al usuario la posibilidad de acceder a ellas con o sin acceso a Internet y, normalmente, sí están en las principales tiendas de aplicaciones móviles. Todo dependerá del grado de desarrollo que se les haya implementado.
Las novedosas apps con React Native
En los últimos tiempos se ha comenzado a desarrollar un nuevo tipo de app basada en la tecnología React Native. Ésta permite crear aplicaciones nativas con un código único y más simple tanto para iOS como para Android. La principal ventaja es que las apps con React Native no están programadas ad hoc para cada plataforma, por lo que ahorra en costes sin restar calidad en la experiencia de usuario.
Los tipos de aplicaciones móviles con ejemplos
Ahora bien, llegados a este punto quizás no todo el mundo entienda del todo que diferencias hay entre unos tipos de apps y otros. Programación, código, lenguaje… Términos que, si no estás hecho al mundo del desarrollo, pueden resultar complejos de entender. Por lo tanto, lo mejor para que el usuario que no tiene unos conocimientos técnicos muy avanzados es citar los tipos de aplicaciones móviles con ejemplos. Vamos a ello:
- Ejemplo de aplicación nativa: Instagram, Facebook o cualquier app de una red social de este estilo.
- Ejemplo de app web: un buen ejemplo es cualquier versión de la mayoría de medios de comunicación, como puede ser El Mundo o El País.
- Ejemplo de aplicación híbrida: son más complicadas de encontrar, pero una de las más populares es la de la empresa Ulabox.
¿Qué tipos de aplicaciones no podemos desarrollar para móviles?
Pero, tras analizar los tipos de apps móviles que se desarrollan actualmente, en un panorama en el que parece que no hay límites, surge la gran pregunta que queremos destripar en este artículo: ¿qué tipos de aplicaciones no podemos desarrollar para móviles en la actualidad?
Salud, deporte, videojuegos, transporte, restaurantes y alimentación, economía, inversión, compraventa de artículos, medios de comunicación… Las hay para todos los gustos, de todos los sectores. Las hay tan tremendamente frikis como para señalar en qué lugares del mundo ha hecho uno sus necesidades. Por eso, resulta complicado pensar que, con tantas apps móviles y en un contexto social en el que el mundo online avanza a una velocidad vertiginosa, aún haya límites o imposibles.
Pero sí, los hay. O por lo menos, todavía. De hecho, digamos que hay dos tipos de aplicaciones que no podemos desarrollar para móviles en este momento:
Los gestores de bases de datos de las empresas
Los conocidos como Sistema Gestores de Base de Datos (SGBD) o DBMS (Data Base Management System), por sus siglas en inglés. Estamos hablando de los clásicos programas con los que se suelen gestionar sus bases de datos las empresas. Debido a la gran cantidad de información que almacenan y manejan estos gestores, resulta aún muy complicado extrapolarlo a nivel técnico a una aplicación móvil.
La principal razón es su utilidad y pragmatismo, puesto que el consumo de recursos del software de un ordenador es muchísimo mayor y más potente que el de cualquier dispositivo de menor tamaño, como un smartphone o una tableta. Es decir, que sería muy poco práctico a la vez que tremendamente costoso desarrollar gestores de bases de datos como aplicaciones móviles.
Los conocidos como Back Office
Nos encontramos prácticamente con la misma problemática que en el caso anterior. Al ser un elemento con el que se gestiona la parte enfocada en la realización de tareas de de la propia empresa, como la informática o la gestión de recursos humanos, no es recomendable que se desarrolle en dispositivos móviles.
Los volúmenes de información y de datos son inmensamente grandes, por lo que se necesita una elevada capacidad para manejar y guardar datos, gestionar la contabilidad con los pagos y cobros, utilizar tecnologías de la información… Estamos hablando de los sistemas que almacenan datos de toda una compañía a nivel interno (recursos humanos, comunicación, finanzas…), por lo que para compañías grandes es información casi ilimitada. ¿Compensa desarrollar algo así para un dispositivo móvil? Ahora mismo la comunidad de desarrolladores no lo ve.
En definitiva, si hay alguna clase de aplicaciones que no podemos desarrollar para móviles sería aquella que exige demasiados recursos por su inmenso tamaño. Si a veces nos quejamos cuando nuestro smartphone funciona demasiado lento o mal porque tenemos muchas aplicaciones simples, imaginemos cómo sería si tuviésemos integrada una base de datos así o un back office.
Para todo lo demás, un buen desarrollo ofrece un amplísimo universo de posibilidades en cuanto a apps. Basta con entrar en las tiendas de Android o iOS y comprobar los millones de tipos de aplicaciones que existen. Ya sea para ocio o a nivel empresarial, la oferta es brutalmente amplia, por lo que también es recomendable apoyarte en un buen equipo para lanzar la tuya y diferenciarte. Y en eso nosotros, Gunka Studios, sí que no te vamos a fallar.